España tiene probablemente el mejor servicio en lucha antiterrorista de Europa y uno de los mejores del mundo. Esto es por varias causas, como la experiencia que se adquirió en la lucha contra ETA. Aquí, al mínimo indicio de que existe algún proceso de radicalización de individuos, los agentes actúan. Muchos de los países de nuestro entorno suelen citar a España como un referente en la lucha antiterrorista.